Al lugar se personaron ambulancia y cinco vehículos de la Guardia Civil, ataviados con trajes anti disturbios, que calmaron los ánimos, aunque no faltaron los silbidos en contra de la benemérita por parte de algunos de los presentes. Según comentaban algunos testigos, otro grupo de jóvenes se encontraba por la zona con un cuchillo de cocina escondido en los pantalones.
La noche previa también se produjeron algunos incidentes, con lanzamiento de piedras y botellas en la zona.