El consumo de los bares y pubs de la Región ha caído entre un 30 y un 50 por ciento, aproximadamente, y es que, según su presidente, Pedro Martínez, "el consumo está muy comedido", aunque "este es un problema general de todos los bares de ocio y de la restauración debido a la crisis".
De hecho, "los jueves por la noche prácticamente ya no existen", sólo salen estudiantes y cuando hay alguna fiesta universitaria, "sino tampoco", a lo que se une la caída "considerable" de los viernes, centrándose la actividad en los sábados.
Cada vez "tenemos menos franjas horarias de actividad mientras los gastos siguen siendo lo mismo", ha remarcado el presidente de la Asociación de Pubs y Bares Especiales de la Región de Murcia, "con lo que tenemos que crear ofertas y hacer más cosas".
Pero, ha matizado en declaraciones a Europa Press, "al final por mucho que ajustes costes o abras dos o tres días en lugar de siete, los gastos son fijos --agua, luz, impuestos, alquiler--, "pero con unas franjas de actividad muy pequeñas", y buscar el equilibrio "es complicado".
Ante este panorama los bares de la Región de Murcia han ajustado sus márgenes "para dar más servicio, calidad y atención", pero, según Martínez, "lo que hay es un problema de fondo", que es que hay una crisis, "que no pasa", que esto "no espabila, que llevamos cinco años así y hay un consumo muy moderado o bajo".
Comparativamente, "hemos caído con respecto a otros años pero no hay una cifra precisa, hay locales que han caído un 30 por ciento, otros un 40 y otros tantos un 50 por ciento", de hecho, "los que mantienen bares y actividad de tarde, se mantienen un poco mejor, y los de noche posiblemente han caído un poco más".
INTENTÁNDOLO TODO En este sentido, Pepe Barceló, dueño de The Black Crow en la avenida Pérez Casas, asegura que las ventas han bajado mucho, un 50 por ciento los jueves, alrededor del 30 por ciento los viernes y sábados, el domingo poca cosa, "de hecho ni abrimos", y el lunes, martes y miércoles "ni hablar, hay poco que rascar".
"Estamos intentándolo todo, bajar precios, hacer promociones, pero la cosa está complicada, más ahora de cara al verano", ha señalado Barceló, que opina que se debe a la crisis, la falta de trabajo y el miedo que tiene la gente a lo que pueda venir.
También podría deberse a la presencia policial en esta zona, "todo puede ser", aunque, ha puntualizado en declaraciones a Europa Press, ahora hay menos, quizás porque "hay menos clientes, jaleo y quejas".
Aclara al respecto que la policía pasa por la noche, a la hora de recoger las terrazas "por si alguien se le pasa o se rezaga un poco" y sólo "de vez en cuando" lo hacen durante el día, piden documentación y comprueban que no hay exceso de ocupación de la vía pública, algo "sobre lo que estamos muy concienciados", ha aseverado.
Pero hay que matizar que "los hosteleros no queremos perjudicar a los vecinos", y que esto es una zona de terrazas, que hay que respetar, "la mejor de Murcia, por cierto, y así nos gustaría mantenerla".